25 DE NOVIEMBRE 2.024. DÍA INTERNACIONAL CONTRA LA VIOLENCIA HACIA LAS MUJERES

25 DE NOVIEMBRE 2.024. DÍA INTERNACIONAL CONTRA LA VIOLENCIA HACIA LAS MUJERES

un año más, El día Internacional contra la Violencia Machista nos manifestamos recordando los 1.286 asesinatos a mujeres desde que que el 2003, año en que comenzaron a contabilizarse. #BASTA DE VIOLENCIA MACHISTA!!!! basta de violaciones, de pornografía, de mercar con nuestros cuerpos. ¡Por la Abolición de la prostitución!

En el día en el que denunciamos la violencia contra las mujeres, violencia que no disminuye y que todos los años deja miles de denuncias judiciales y sociales, decimos que:

A las mujeres nos siguen matando por nacer niñas, nos asesinan por ser propiedad, y como tal, pueden disponer de ella a su antojo. De ahí que todas las mujeres hayamos sufrido alguna vez violencia sexual, que exista una violación moral y legalmente aceptada, la prostitución, junto con su escaparate audiovisual que es la pornografía, que se explote a mujeres para que gesten bebés para terceros, que la pobreza siga teniendo nombre de mujer.

¿Podemos tener espacios sólo para mujeres? ¿Deportes sólo para mujeres? ¿Centros de crisis para víctimas de violencia sólo para mujeres? ¿Lugares donde sentirnos protegidas, donde poder desarrollarnos como mujeres, donde poder expresar ideas feministas, donde poder denunciar la violencia que sufrimos, donde las portavoces de este movimiento sean mujeres feministas?.

Por esta razón desde el Foro Feminista de Castilla y León no acudiremos a la lectura del manifiesto de la coordinadora de mujeres, porque consideramos que sólo las mujeres nacidas y socializadas como mujeres son víctimas de la violencia machista y son ellas las que pueden y deben hablar y pueden y deben leer un manifiesto en el día de lucha contra la violencia machista.

En los últimos años, en algunos países del mundo, se han ido aprobando leyes que permiten que cualquier varón pueda “autodeterminarse” mujer con su palabra como único trámite, lo que pone en peligro los derechos de las mujeres y las niñas. Nosotras, como feministas, no podemos permitir que el género se introduzca en las leyes como una “identidad” y se proteja por encima de la categoría sexo.

El género no es una identidad, el género es el conjunto de normas, estereotipos y roles, impuestos socialmente a las personas en función de su sexo. El género es un instrumento que favorece y perpetúa la situación de subordinación en la que nos encontramos las mujeres. Por eso, admitirlo como “identidad” implica esencializarlo, anulando por completo las posibilidades de luchar contra las imposiciones que conlleva.

Dirán que con separarnos de la manifestación contribuiremos a que el feminismo esté dividido; eso no es cierto; el feminismo tiene clara su agenda, y se define sin lugar a dudas como abolicionista. El feminismo abolicionista se distancia de quienes usurpan el nombre del feminismo para implementar políticas neoliberales contrarias a los derechos de las mujeres, nos negamos a ser una pieza más del engranaje del capitalismo y del patriarcado.

Nos distanciamos de quienes no cuestionan la división sexual del trabajo, de las que no analizan las situaciones de opresión o discriminación, de las que pensaron que el machismo acabaría el día en que una mujer ocupara un alto cargo. Nos acusan de ir de la mano de la derecha, algo completamente infundado para desprestigiarnos. Es la izquierda neoliberal la que le está poniendo una autopista al fascismo al centrarse exclusivamente en los sentimientos y en los deseos, especialmente en los que se basan en la explotación de mujeres: compra de niños, prostitución, pornografía y violencia.

El feminismo sabe bien que de la derecha cabe esperar bien poco –padecemos su agenda en comunidades como Castilla y León o Madrid, pero igual de poco puede esperarse de quien ha abandonado la crítica a las estructuras de poder y la justicia social como horizonte de emancipación.

Y mientras defienden la agenda transfeminista y la agenda del lobby proxeneta, reivindicamos el feminismo abolicionista teoría política con una agenda clara, que tiene un gran potencial transformador social, político y económico. La emancipación de las mujeres sólo tiene un camino, el mismo desde hace más de tres siglos: el abolicionismo de las estructuras de opresión patriarcales y capitalistas: “no hay elección en la prostitución”, “la pornografía es prostitución”, “las mujeres ni se compran ni se alquilan”, “ser mujer no es un sentimiento”. La violencia machista existe y asesina a decenas de mujeres todos los años.

¡El feminismo no se rinde!

QUE VIVA LA LUCHA DE LAS MUJERES